Lo hicieron, porque no sabían que era imposible.
-Anónimo
¿Cómo saber si estamos dando el 100 %? Era la pregunta que cerraba el texto que te presenté algunos post atrás, donde la experiencia de una atleta que se superaba a ella misma nos servía para acercarnos a una definición sobre qué es la motivación. Hoy, voy a contarte una posible respuesta.
Frases de motivación
La historia de la humanidad está llena de proezas de seres que fueron más allá de sus límites. Nick Vujicic, Nando Parrado o Jessica Cox por mencionar algunos, que se convirtieron en grandes leyendas y dieron origen a frases motivadoras que nos alientan a esforzarnos al máximo en nuestras capacidades.
La cronica que más recuerdo es la de una madre que con escasos 40 kilos de peso, levantó un auto para rescatar a su hijo recién nacido, atrapado éste debajo del mismo. Una historia simple que parece no tener nada que ver con la motivación. Sin embargo, la acción de esta madre me lleva a varias preguntas: ¿Por qué cuando estoy frente a una situación límite doy mi 100% o más? ¿Qué lleva a desafiar la naturaleza humana de esta forma? ¿Cómo conseguir la motivación necesaria para superarme a mi mismo?
¿motivación o emoción?
Días atrás, en una reunión con amigos hablábamos sobre la importancia de dormir. Andrés estaba molesto porque no podía dormir debido a problemas con sus estudios; Juan, risueñamente le pasó la fórmula del descanso perfecto “Cuando no puedo dormir, pienso en un imposible”. Y remató “¡Que Colón[1] salga campeón!”
Todo nos reímos, luego cambiamos de tema y la cosa quedó en el olvido, menos para mí: Su idea feliz, la que lo relajaba y lo ponía en un estado de paz era un imposible…
¡La clave está en las emociones!
Que tu motivación sea una idea imposible a simple vista parece carecer de lógica, sin embargo, imposible dentro de un cierto marco (modelos mentales) es un tema de interpretación.
Si la mente está de acuerdo y planta la visión de lo posible en lo imposible, las emociones fluyen, poniendo todas nuestras capacidades y más para lograrlo.
Si la mente está de acuerdo y planta la visión de lo posible en lo imposible, las emociones fluyen, poniendo todas nuestras capacidades y más para lograrlo.
¿Qué imaginas que pensó la madre al ver a su hijo bajo las ruedas del auto? ¿Qué todo estaba perdido? ¿Qué era imposible levantar un auto?
Nada de esto pasó por su corazón y su mente. Hubo una conexión entre objetivo y sentimiento sin lugar a las dudas.
Nada de esto pasó por su corazón y su mente. Hubo una conexión entre objetivo y sentimiento sin lugar a las dudas.
La madre estaba absolutamente conectada con su hijo (emoción) tuvo la visión de ver su hijo sano y salvo (motivación) y esta combinación no dejó entrar dudas a su mente
Estoy absolutamente convencido que cuando el pensamiento y los sentimientos están en armonía, se fecunda una motivación perfecta, donde las reglas de la naturaleza parecen desafiarse a si mismas.
Para terminar te recomiendo que veas algunos cortos de gente que hace cosas imposibles:
La entrada completa esta en http://www.marbus.com.ar
